sábado, 13 de agosto de 2016

CASA DE SALUD DE MUJERES, CAROLINA DOURSTHER



                                CASA DE SALUD DE MUJERES, CAROLINA DOURSTHER

En cierta ocasión decidimos dejar por un momento la ciudad pero sin salir de la región metropolitana, las miradas se dirigieron sin dudarlo a San José de Maipo, y allí descubrimos cosas interesantes. Pensamos que solo veríamos campo y algunas casitas bonitas pero nunca imaginamos conocer lugares interesantísimos como el Hospital Carolina Doursther o como se le conoce formalmente Casa de Salud de Mujeres Carolina Dourster. Este hospital es uno de los lugares históricos que mas nos ha encantado, fue declarado Monumento Nacional de Chile en la categoría de Monumento Histórico mediante el Decreto exento 672 del 24 de agosto del 2004.

Este hospital se construyo el año 1830 por Juan Doursther y luego paso a manos de su hija, Carolina, Es ella quien años mas tarde en su testamento consigna el establecimiento a la comunidad y su hijo Juan Tocornal Doursther quien materializa sus deseos al entregar la casona a la Junta de Beneficencia de Santiago en 1911

Este hospital se convirtió en un espacio terapéutico por la obra de Ricardo Larraín Bravo y en clima cordillerano lo termino de constituir en el lugar ideal para el tratamiento de la tuberculosis. Sin ir mas lejos la mismísima Carolina Dourster logro manejar su enfermedad gracias a los factores medio ambientales tan beneficiosos.

Este hospital para que el visitante lo conozca al menos en palabras e imágenes, tiene la apariencia de una gran casona de dos pisos pero cuenta con una extensión de tres pisos hacia sus extremos los que fueron demolidos luego del terremoto de 1985, si usted desea puede buscar los vestigios de esas extensiones, pero mas intresante es el interior que cuenta con 25 habitaciones que se distribuyen entre ambos pisos las cuales han tenido sus modificaciones con el tiempo pero siguen conservando ese aire de antiguo romántico que encanta en este hospital.

Cabe decir que este hospital estuvo cerrado y los enfermos que estaban en él fueron trasladados al Sanatorio Laennec, ya en 1929 el edificio reabrió sus puertas para atender a enfermos tuberculosos curables con cerca de 50 camas y en 1944 la Junta de Beneficencia cedió el hospital al Servicio Medico Nacional de Empleados y con la fusión de los organismos de salud en 1979, el sanatorio pasa manos del Servicio de Salud Sur Oriente año en el que se establece su nueva función como centro hospitalario.

Cuando llegamos la primera vez a este hospital nos toco duro, tuvimos que caminar mucho para lograr verlo y encontrarlo en la parte alta de la ciudad de San José de Maipo su estilo ecléctico pero con colores que llaman a la serenidad y con una vista privilegiada más un aire único que eleva nos dijo que el sacrificio valía la pena, esa primera vez que lo visitamos nos dieron permiso para conocerlo y recorrerlo y nos dejo con ganas de volver en una segunda oportunidad lo que ocurrió al año siguiente, el 2014.

En la segunda ocasión volvimos no solo con cámaras fotográficas también gravamos y esta vez también nos concentramos mas en la casa que esta antes del hospital, pero que pertenece al recinto. Esta casa esta en completo abandono, destruida pero a pesar de todo no atemoriza. Aquí viene lo interesante. Nosotros a menudo conseguimos poder entrar a lugares especiales, y nos suceden cosas espéciales, en esta casa en particular al revisar los audios y videos descubrimos  voces que eran distintas a nosotros dos entre eso el llanto de un bebe. Lo increíble no paso solo en eso, sino en el momento en que subimos algunas fotos sin revelar la ubicación y una persona, un extranjero vio estas imágenes y reconoció la casa que en un tiempo fue la casa de uno de los directores del hospital, el era su hijo y nos conto como era esta casa y lo que había sido antes y después, entonces cobraron sentido algunos sonidos que grabamos, alguna vez fue un lugar para atender a menores e incluso habría tenido un columpio en el jardín que le rodea.

La fotografía, comunica, rememora, sorprende, encanta, y revive muertos.










Catalina Schopf-Manuel Venegas
Todos los escritros y fotografías estan bajo registro propiedad intelectual 13 de Agosto 2015 nº 256200, Santiago de Chile

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