jueves, 8 de septiembre de 2016

ESTE ES UN VIAJE SIN RETORNO

ESTE ES UN VIAJE SIN RETORNO


Santiago es una ciudad que a simple vista del capitalino no tiene mucho atractivo fuera de uno que otro parque y museo e incluso es insoportable para algunos según sus dichos llegando a llamarla “Santi-asco” e incluso los amigos de provincia muchas veces hablan de arrancar de Santiago, sin embargo es inevitable que aun deseando irse, inconscientemente busquen una forma de alargar la estadía o de volver prontamente, eso es porque fuera del estrés de la ciudad, de alguna forma deja una estela de encanto en los que suelen salir a caminar por sus calles aun sin prestar atención a sus detalles. Si eso es así con una persona común, imagínese como será con un “Callejero Capitalino” en este caso un Fotógrafo Callejero y su partner que a menudo salen a gastar suela por las calles a veces visitadas más de una tres o más veces, pero que siempre entrega un mensaje o una sorpresa distinta.

Santiago es una ciudad que ofrece muchos contrastes que van desde su arquitectura hasta sus habitantes lo cual resulta muy interesante al punto que ya es inevitable salir a la calle y ver en todas partes momentos para inmortalizar pero que nos exige con mucho esfuerzo tratar de discriminar entre cual es mejor que otro ya que todos son únicos en su clase. Claro está que existen momentos en que todo parece común, nada llama la atención hasta que no se hace un cambio de formato por ejemplo, muchas veces nos vamos a captar el movimiento en las calles céntricas de Santiago, como Ahumada, Huérfanos, Estado, Agustinas o la misma Plaza de Armas pero hay momentos que hasta las caras nos parecen iguales, entonces solo caminamosunas cuadras mas hacia el poniente camino a Yungay, República, Brasil,

Concha y Toro o incluso si queremos caminar algo mas llegamos hasta Meiggs y ya
todo es distinto entonces la chispa reaparece y de manera inevitable todo se vuelve un torbellino de emociones de risas de gestos y hasta los muros se vuelven a buscarnos para que los retratemos. La fotografía no solo se trata de retratar momentos para inmortalizar, en el equipo que hemos formado ambos la fotografía se ha logrado complementar con la psicología pero mas que nada con el retrato de historias y la historia misma, permitiéndonos aprender de la naturaleza humana y desarrollando una especie de sensibilidad que nos ha ido puliendo en la lectura del comportamiento anticipando acciones y reacciones. En este sentido el fotógrafo profesional siempre atento a su entorno tiene ahora cuatro ojos, es decir los propios y los de su compañera que está aprendiendo a descubrir el mundo de la fotografía pero tiene una sensibilidad distinta al ser formada como psicóloga por lo que ella puede ver hechos antes que sucedan o en los rayados o colores de la ciudad ver intenciones que van mas allá de lo estético, logrando desmembrar las imágenes una vez ya captadas.


Con este libro, estamos experimentando la magia del resultado de un gran trabajo recopilatorio de Manuel Venegas que es quien se lleva en realidad todos los meritos. No sabemos si este libro pasara inadvertido o se convertirá en un gran clásico de la fotografía nacional, pero está hecho con sentimiento y con esfuerzo y con las chispas de magia inspiratoria de la ciudad. Nuestro consejo es no rendirse, si no encuentras la imagen en una calle camina dos y si dos no son suficiente entonces tres y si no… solo camina y conoce la ciudad, relájate y disfruta caminando, observando detalles y a las personas hasta que finalmente te canses y vuelvas a casa y al día siguiente con una mejor idea sal de nuevo y camina las mismas calles y te darás cuenta que son hasta los edificios distintos entonces comienza la segunda fase de la magia el segundo round que le hace la pelea al día anterior que te dejo en coma pero que con ambas lecturas te hacen sacar tremendos análisis de una ciudad mutante.


Recordamos también que la fotografía se convierte en arte y placer solo cuando se deja de lado tanta técnica y se usa la emocionalidad y el buen ojo oportuno, la fotografía que se disfruta no necesariamente requiere de encuadres perfectos, de mantener un horizonte alineado o de cortar las imágenes de la manera académicamente correcta, la fotografía requiere de alma continuamente alma para poder captar lo invisible para la mayoría de las personas. Eso si… lo único que jamás debes olvidar como fotógrafo callejero es la luz, la cual merece de estar siempre presente ya que como todos saben no es lo mismo un horizonte de amanecer a uno de ocaso el cambio de intensidad, los colores cambian totalmente la intencionalidad y también la emocionalidad….


La fotografía es magia… solo falta abrir los ojos del alma para darse cuenta.



Catalina Schopf-Manuel Venegas
Todos los escritros y fotografías estan bajo registro propiedad intelectual 13 de Agosto 2015 nº 256200, Santiago de Chile

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por seguir visitando mi blog...